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S'estan mostrant les entrades d'aquesta data: octubre, 2025

LA EJEMPLARIDAD NO ES UNA OPCIÓN: ES LA BASE DE LA DEMOCRACIA.

La confianza ciudadana en las instituciones democráticas no se pierde de un día para otro: se erosiona poco a poco. Con cada silencio, con cada sospecha que no recibe respuesta. Y cuando esa desconfianza se instala, no hay relato ni discurso que la repare. Solo los hechos, la transparencia y la ejemplaridad pueden intentar reparar la brecha que, de lo contrario, se agranda siempre en beneficio de la antipolítica y, por lo tanto, de los movimientos antidemocráticos. En El Campello, como cualquier municipio, el Ayuntamiento no es una entidad abstracta: es la casa común; es quien gestiona el dinero público para, a través de los representantes electos, mejorar, en lo posible, la vida cotidiana de la ciudadanía. Por esto, cada representante electo tiene una responsabilidad que va más allá de la gestión: tiene la obligación de comportarse con escrupulosa legalidad, con claridad en sus actos, y con ejemplaridad en su conducta. A cualquier ciudadano se le exige cumplir la ley. A un cargo p...

Como tirarse a la piscina sin saber si hay agua.

La piscina municipal de El Campello vuelve a retrasarse: Arena ha anunciado que recurrirá la adjudicación ante el Tribunal de Recursos Contractuales, alegando que la oferta de Ego Sport Center es temerariamente baja. Lo curioso no es el recurso, sino que la adjudicación se haya producido pese a ese informe. ¿Quién corre más: el técnico que alerta o el político que adjudica? ¿Por qué se ignora una advertencia que, en cualquier otro contexto, paralizaría el proceso? ¿Qué pesa más: la viabilidad del servicio o la urgencia de la foto? La pregunta ya no es gestión pública o privada: ese debate fue clausurado por casi todos los grupos, con alguna excepción que honra la inteligencia institucional. Incluso el gobierno de coalición ( que pomposamente se autodenominó como progresista) del periodo 2015–2019, que podría haber explorado fórmulas mixtas o cooperativas, que podría haberla puesto en uso incluso paralelamente al.proceso de contratación ,se resignó a la lógica neoliberal privatizadora...

Mentir no es delito: el mensaje que erosiona la democracia

En un país donde la confianza institucional se tambalea, el Partido Popular ha decidido añadir una piedra más a la erosión interesada de las instituciones: “Mentir no es delito”. Así justifican que Miguel Ángel Rodríguez, jefe de gabinete de Isabel Díaz Ayuso, reconociera ante el Tribunal Supremo haber difundido un bulo sobre la Fiscalía. Lo hizo para proteger a la presidenta madrileña, manipulando un correo oficial y filtrándolo a la prensa. El PP, lejos de desautorizarlo, se parapeta en la literalidad jurídica: si no es delito, no hay problema. Pero sí lo hay. Y es profundo. La frase no solo es una defensa legal: es una declaración cultural. Transmite que la mentira, si sirve al poder, es admisible. Que la ética pública puede subordinarse al cálculo político. Que la verdad, ese pilar invisible que sostiene el pacto democrático, puede relativizarse sin coste alguno. Cuando un partido normaliza la falsedad desde cargos institucionales, está diciendo que el poder no tiene por qué ser...

CUANDO LA DERECHA HABLA DE CORRUPCIÓN.

En España, la derecha puede hablar de corrupción. Lo que no puede ,o no debería, es hacerlo sin pudor. Porque cuando el Partido Popular se sube al púlpito de la ética, el eco que resuena no es el de la regeneración, sino el de la hipocresía. El PP es el único partido condenado por corrupción en democracia. No por errores administrativos, no por casos aislados, sino por una trama sistemática (la Gürtel) que convirtió la política en un negocio de sobres, favores y financiación ilegal. La Audiencia Nacional lo dejó claro: el partido se lucró. Y sin embargo, ahí están. Repartiendo carnets de decencia, como si el pasado fuera un malentendido. Pero la memoria democrática no se borra con titulares. Se recuerda. Se recuerda el 11M, cuando el gobierno de Aznar mintió a todo un país en plena tragedia, manipulando el dolor para salvar una campaña. Se recuerda el accidente del Metro de Valencia, donde 43 personas murieron y las familias fueron silenciadas. Se recuerda el Yak-42, donde el Estado ...

La paz en Palestina: entre la esperanza y la sospecha.

La paz en Palestina: entre la esperanza y la sospecha La firma del alto el fuego entre Israel y Hamás marca un punto de inflexión en una (mal llamada) guerra que ha dejado más de 67.000 palestinos muertos y ha desplazado al 90% de la población de Gaza. La comunidad internacional celebra este acuerdo como un paso hacia la paz, pero para quienes han vivido bajo los escombros, la alegría es contenida,  casi dolorosa. Porque si bien cesan las bombas y asesinatos, no cesa la memoria, ni la sospecha de que la reconstrucción será, como tantas veces, un negocio. La guerra, que comenzó tras el ataque de Hamás en octubre de 2023, ha sido unilateral en su devastación. Israel, con su asedio militar  sobre Gaza, ha ejecutado una ofensiva que muchos organismos internacionales califican como genocida pero que a la derecha española le cuesta definir. El alto el fuego contempla la liberación de rehenes, la retirada parcial de tropas israelíes y la entrada de ayuda humanitaria. Pero también a...

España, cortijo de señoritos: del autoritarismo cool al neoliberalismo sin alma

Ni dios, ni patria, ni rey. La extrema derecha española ha mutado. Ya no se arropa en los símbolos tradicionales del conservadurismo rancio; ahora se disfraza de modernidad, de libertad sin reglas, de anarcoliberalismo trumpista. Ha abandonado el púlpito, la bandera y la corona para abrazar el algoritmo, el bulo y el tuit incendiario. Lo que antes era cruzada, ahora es clickbait. La Iglesia, antaño aliada incondicional, les ha reprendido por sus discursos racistas y xenófobos. El monarca, en un gesto insólito, ha denunciado en la ONU la masacre sionista en Gaza, dejando a los ultras sin su último bastión simbólico. ¿Y la patria? La patria es la suya: la de los privilegios, la de los apellidos compuestos, la del “vivan las cadenas” que sus seguidores corean sin entender que les quieren encadenados y amordazados. España se ha convertido en un cortijo. Un país donde los señoritos han convencido a los jornaleros digitales de que la democracia es un estorbo, que los derechos son caprichos y...