"LOCALISMO FRENTE A POLARIZACIÓN"
Si,
este es el título del artículo publicado por José Fernández
Albertos en el País hoy mismo. ¿Una casualidad, pura coincidencia?.
Seguramente. Pero la cuestión es que ha coincidido y ha sido fruto
de la casualidad que el mismo día de la publicación del artículo,
en el Pleno municipal haya dedicado más de dos terceras partes de
las más de tres horas de duración a trasladar al debate municipal
cuestiones que están discutiéndose en el ámbito estatal.
He
utilizado el título del artículo porque me ha parecido que en sí
mismo resume un sentimiento que comparto sobre la acción política
municipal como “caja de resonancia” de los asuntos que los
partidos políticos debaten en el ámbito estatal. ¿Porqué?.
Evidentemente eso deberían explicarlo los representantes políticos
que presentan las mociones al Pleno junto a las direcciones de esos
partidos que remiten a sus representantes los borradores de moción
para que sean presentados. ¿Que fin persiguen?. En mi opinión,
incrementar, de alguna manera, la legitimidad de sus posiciones, o
simplemente cumplir con un “deber” hacia las estructuras
políticas orgánicas. Cualquier de las dos explicaciones podría ser
válidas, e incluso algunas otras tendrían cabida.
En
su artículo F. Albertos señala un estudio realizado en Estados
Unidos, indicando que la existencia de un “ecosistema mediático”
local modula el comportamiento de los representantes electos. No
descubro nada si digo que, en primer lugar el sistema estadounidense
es unipersonal, o lo que es lo mismo: se elije directa y
personalmente al representante. En España se elijen los
representantes a través de listas cerradas y bloqueadas, por lo que
la dimensión que adquiere el partido político es más relevante que
en Norte América, donde únicamente es una referencia.
La
diferenciación entre intereses locales y el conflicto político
general marca una línea importante, y coincido que la presencia de
asuntos locales ofrece un marco importante que posiblemente
permitiría llegar a acuerdos con mayor facilidad que en el Estado.
Es evidente que los asuntos más mundanos son las que adquieren
relevancia en la vida cotidiana de los y las vecinos y vecinas. De la
capacidad de los partidos políticos de dotar de sentido, de ofrecer
alternativas que superen, al menos en parte, el incrementalismo, el “ir
tirando”, la continuidad sin más de las políticas, confiere
sentido a la democracia de partidos municipal.
Si
un vecino, con inquietudes políticas, hubiese asistido al Pleno,
quizá habría salido con la sensación que yo he tenido al
visionarlo a través de las redes sociales: poco o nada tiene que ver
con la vida cotidiana discutir de asuntos que se están debatiendo en
el Estado o en la Comunidad autónoma. Si repasamos las mociones
presentadas por los grupos políticos, y elaborásemos, a modo de propuesta análisis de la dimensión local de la acción política,
estableciendo una propuesta de baremo (de 0 a 5 en cuanto al interés
local), podríamos quizá elaborar una hipotética tabla de interés local en
el debate plenario, fuera de los puntos de gestión que, evidentemente, son competencia del gobierno y en el que la oposición tendría que
plantear propuestas alternativas, o como mínimo, complementarias.
En
el punto 6, Podemos presenta una moción proponiendo la elaboración
de un reglamento de cronista oficial. ¿Podríamos darle una
puntuación de 2 en la escala que hemos propuesto, o traducido: de
interés moderado¿. En el punto 7 tenemos la moción presentada por
RED proponiendo la elaboración de un concurso de ideas para la
urbanización de la Calle San Ramón. ¿Aquí la escala podría ser
de 4, o de bastante interés local?. En el punto 8, la moción
presentada igualmente por RED sobre transporte público local. En la
escala ¿podríamos darle un 4, o de bastante interés local?. En el
punto 9, la moción presentada conjuntamente por PP y Cs sobre la no
realización de concesiones al independentismo. Aquí, la escala de
interés local ¿podría ser de 1, o bajo interés para la vida
cotidiana de la ciudadanía campellera?. En el punto 10, la moción
presentada por el PP sobre la defensa de las libertades educativas
constitucionales. ¿Podríamos dar un 1 en la escala propuesta?. El
punto 11, la moción presentada por Cs sobre plurilingüismo. En la
escala propuesta ¿podría tener un 1?. En el punto 12, la moción
presentada por Podemos sobre el “pin parental”. ¿Un 1?. El punto
13 la moción de Vox contra la imposición lingüistica. ¿Un 1?. Y
finalmente en el punto 14, moción de Vox sobre las
“responsabilidades políticas del PSOE en el caso de los EREs de
Andalucía. Yo le asignaría un 1, siendo benévolo.
Creo,
humildemente que las mociones deben recoger posiciones políticas,
con su ideológica, sustentada en la viabilidad, y si así se
considera, en relación con otros temas de dimensión extramunicipal.
Pero creo que la principal tarea de los grupos políticos es ser
mínimamente coherentes con los programas y propuestas con las que se
presentaron ante la ciudadanía. De lo contrario, no harían falta
elecciones locales, pues con una mera trasferencia del voto estatal,
bastaría para asignar la representación local. La democracia local
es algo importante y debería ser una prioridad mejorarla, algo que,
visto lo visto, nuestros representantes no siempre tienen en cuenta,
actuando en demasiadas ocasiones como repetidores de la señal que
los partidos les transmiten. Y ésto, en opinión de éste humilde
opinador, no beneficia, ni el acuerdo ni la solución de situaciones
problemáticas o la implementación de políticas de interés
colectivo.
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