ENEMIGOS CONVENIENTES.
Junto a la deriva secesionista del nacionalismo catalán, la aparente incapacidad explicativa de la izquierda, están configurando el escenario “ideal” para que en caso de una repetición electoral, la derecha salga reforzada. Quizá sea éste el objetivo de los partidos nacionalistas: tener un enemigo que incremente su legitimidad ente su electorado. Porque también la cuestión va de eso: de intereses electorales. En Euskadi Bildu y PNV van a competir en las urnas aproximadamente en abril o mayo del próximo año y quizá septiembre sea el mes en el que en Catalunya se celebren las elecciones autonómicas. Esto, evidentemente, condiciona su “participación” en la investidura y propicia que se tense la cuerda respecto al apoyo a la candidatura de Pedro Sánchez a la Presidencia del Gobierno. Las posiciones maximalistas, principalmente de los partidos nacionalistas catalanes,creo que tienen como principal objetivo reforzar su electorado, máxime después ...